Y como no puede ser de otra manera, un post nocturno para esta fastidiosa etapa de insomnio que estoy atravesando.
El nombre que elegí para este blog, no es mas que mi monótona realidad.
Esta vez, lo que me desveló fueron mis dudas existenciales.
No se si irme o quedarme en el país. No se si seguir apostando a mi profesión, en la Argentina de las 0 posibilidades, o renunciar nuevamente a todo en busca de lo desconocido, (como lo hice ya a mis 18).
Por mas que me rompa la cabeza tratando de dilucidar el desconcierto, no logro tomar una decisión.. Y es que creo en el destino pero el mío ya se ve tan rebuscado que hasta siento que él mismo esta indeciso..
A veces para decidir bien hay que ver las cosas desde afuera... hacerse a un lado y pensar como pensaría alguien que ni te conoce y después volver y pensarlo de nuevo como uno mismo. Nunca es fácil tomar ua decisión; pero hay que hacerlo, y tiene que ser la que mejor resulte, por eso tenés que tomarte todo el tiempo que necesites. Beso Mar!
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